Bernardino Juárez parece un hombre ordinario, joven y alegre. Es un trabajador de la construcción que vive en Hollister y el orgulloso padre de un niño de 5 años que ama el fútbol. Por fuera, parece relajado y contento con la vida, pero en el fondo, confiesa que hay algo que no le deja vivir en paz: no está asegurado. “¿Qué pasa si algo me pasa y no puedo pagar por la atención médica?”
El año pasado, el miedo de Bernardino se hizo realidad cuando su hernia se hizo demasiado grande para ignorarla. Había consultado a un especialista en una clínica de salud junto a su casa, pero le dijeron que su única opción sin cobertura de salud era ver al trabajador social y esperar a que se llevara a cabo el largo proceso de derivación. Sin embargo, la hernia era tan notable que un amigo se sintió obligado a hablar de su hermano que murió de una hernia reventada y le rogó que hiciera algo al respecto. Bernardino estaba preocupado y se sentía atrapado. Por un lado, no podía hacer el trabajo pesado que requería su trabajo de construcción y tenía que tomar trabajos con mejores pagas. Por otro lado, no tenía seguro médico ni dinero para pagar el tratamiento adecuado. La desesperanza y el estrés de Bernardino lo llevaron a aumentar de peso, perder el sueño y luchar con el alcohol. Con lágrimas en los ojos, “incluso había considerado dejar a mi hijo atrás y volver a México, pero la posibilidad de no volver a verlo era demasiado triste para mí”.
En la desesperación, Bernardino siguió el consejo de un amigo y condujo más de 20 millas hasta el Centro de Salud del Condado de Gardner South en Gilroy. No esperaba mucho, y para su sorpresa, no sólo se le ofreció una cita de consulta dentro de las 24 horas, ¡sino que en realidad era asequible! Allí, se enteró del “Día de la Cirugía”, un programa que es posible gracias a una asociación entre la Operación Acceso, Kaiser Permanente y Gardner Health Services destinada a proporcionar procedimientos quirúrgicos vitales gratuitos a los no asegurados en nuestra comunidad.
“Cuando me llamaron para confirmar que me clasifiqué para este programa”, recuerda Bernardino, “se sintió como ganar la lotería”. El 21 de marzo de 2015, un equipo de profesionales médicos ofreció su tiempo para tratar a Bernardino y a otros como él. Ahora que su salud ha sido restaurada, Bernardino está de vuelta a trabajar su trabajo regular y puede jugar libremente con su hijo.
“Esta asociación nos ofrece la oportunidad más valiosa para que en Gardner ayudemos a los pacientes más vulnerables”, dijo el Dr. Ranjani Chandramouli, Director Médico. Mientras que personas como Bernardino a menudo encuentran muchas puertas cerradas, esta colaboración “nos permite abrirles una puerta. Y esta es, sin duda, el núcleo de nuestra misión en Gardner.
Bernardino está muy agradecido por esta oportunidad y por todos los que la hicieron posible. “La vida no tiene precio. Gracias por verme como un ser humano y por servir a todos sin importar el color de la piel, el lenguaje o la cantidad de dinero que tienen”.
Operation Access está planeando con entusiasmo un segundo Día de Cirugía para el 24 de octubre de 2015 y el personal de Gardner está buscando activamente la próxima ronda de pacientes que, como Bernardino, podrían beneficiarse de este programa que cambia la vida.
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